Es necesario señalar cómo la percepción de la profundidad, en la realidad virtual, está creada de forma artificial, lo que quiere decir que la distancia entre los objetos y el usuario es fingida.
Las gafas de realidad virtual apuntan para ser una de las novedades tecnológicas de la era actual; sin embargo, pese a esto, su uso hace que los músculos oculares deban adaptarse a nueva forma de ver, identificando el movimiento de los objetos en el espacio, por lo que lleva a una fatiga visual tras 15 minutos.
Tal como reportó Infosalud, entre el 40 y el 70% de los usuarios de estos dispositivos desarrollan alguno de estos síntomas, aunque ninguno dura de forma permanente; por tanto, el cofundador de las clínicas oftamológicas Vissum, el doctor Jorge Alió advierte de que antes de utilizar estas gafas hay que verificar si el usuario va a tener un conflicto entre la vergencia movimiento simultaneo de los ojos.
Fatiga visual e incomodidad.
Es necesario señalar cómo la percepción de la profundidad, en la realidad virtual, está creada de forma artificial, lo que quiere decir que la distancia entre los objetos y el usuario es fingida.
Esto, por tanto, lleva a fatiga muscular visual y a una sensación de incomodad, dolor de cabeza o bien: fatiga con el sueño; pero, de momento, no hay estudios que demuestren que estos efectos son negativos para la vista humana.
La fatiga visual causada por la realidad virtual se produce debido a la convergencia-acomodación, un fenómeno donde los ojos deben mantener un enfoque constante en una pantalla cercana mientras ajustan la percepción de profundidad para objetos que parecen estar a diferentes distancias. Esto puede causar una tensión excesiva en los músculos oculares, llevando a síntomas como dolor de cabeza, vista borrosa y molestias oculares. Además, la exposición prolongada a la luz azul de las pantallas puede contribuir a la fatiga visual. Por lo tanto, es importante tomar descansos regulares y ajustar la configuración de brillo para minimizar el impacto en nuestros ojos.
El experto advierte de que las gafas de realidad visual no deben utilizarse con lentes duras o cosméticos al llevar una serie de complicaciones que no pueden garantizar su mejor uso; y es que los usuarios deben obtener una prescripción para utilizarlas en condiciones óptimas.