La radiación de RF puede causar efectos negativos en la salud si se está expuesto a ella durante mucho tiempo y a una distancia corta. Te explicamos cómo protegerte de ella.
La tecnología WiFi nos permite conectarnos a internet sin cables, pero también tiene sus riesgos. El router del WiFi emite una radiación de radiofrecuencia (RF) que puede afectar a la salud si se está expuesto a ella durante mucho tiempo y a una distancia corta.
Algunos de los efectos negativos que se han asociado con la radiación de RF son dolores de cabeza, insomnio, fatiga y problemas de concentración. Estos síntomas pueden afectar a nuestra calidad de vida y a nuestro rendimiento laboral o académico.
Por eso, se recomienda colocar el router del WiFi lejos de la cama, para evitar una exposición excesiva a la radiación de RF mientras duermes. Al mantener cierta distancia, se reduce la intensidad de la radiación a la que se expone tu cuerpo durante largos períodos de tiempo.
Sin embargo, no hay que alarmarse, ya que la radiación de RF no es ionizante, es decir, no tiene la capacidad de alterar los átomos y causar daños en el ADN. La radiación de RF está muy por debajo de los límites establecidos por las autoridades sanitarias y no supone un riesgo grave para la salud.
¿Qué se puede hacer para reducir el impacto de la radiación de RF en nuestro organismo?
Lo que sí debemos hacer es tomar algunas medidas preventivas para minimizar el impacto de la radiación de RF en nuestro organismo. Algunas de ellas son:
- Apagar el router del WiFi cuando no lo estemos usando, especialmente por la noche.
- Alejar el router del WiFi de los lugares donde pasamos más tiempo, como el dormitorio, el salón o la oficina.
- Usar cables ethernet para conectar los dispositivos que no necesiten WiFi, como el ordenador o la televisión.
- Evitar el uso de dispositivos inalámbricos cerca de la cabeza, como los auriculares bluetooth o los teléfonos móviles.
- Utilizar protectores o fundas que bloqueen la radiación de RF de los dispositivos electrónicos.
Siguiendo estos consejos, podremos disfrutar de los beneficios de la tecnología WiFi sin poner en peligro nuestra salud. Recuerda que la prevención es la mejor forma de cuidar de tu bienestar.
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