Una nueva manera de implementar esta tecnología de forma positiva
En un esfuerzo conjunto por abordar uno de los desafíos más urgentes de la actualidad, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) y la corporación International Business Machines (IBM) han unido fuerzas para utilizar la inteligencia artificial (IA) en la lucha contra el cambio climático.
Este fenómeno ya está dejando sentir sus efectos en todo el mundo, con eventos climáticos extremos, sequías y escasez de recursos naturales. Conscientes de la urgencia de la situación, tanto la NASA como IBM Research han decidido actuar a través de esta tecnología en auge.
La IA se presenta como una herramienta fundamental en este esfuerzo. Mediante el análisis de datos recopilados por los satélites Landsat y Sentinel-2, se está creando un modelo geoespacial que permite comprender mejor los cambios en la superficie terrestre y su relación con el clima.
Así sería la estrategia
El principal enfoque de esta iniciativa reside en el uso de operaciones matemáticas y algoritmos, que permitirán procesar datos recopilados sobre el cambio climático y encontrar soluciones a problemas específicos relacionados con ello. Estas soluciones incluirán la corrección atmosférica, la identificación de nubes y sombras, entre otros aspectos cruciales.
El modelo geoespacial resultante proporcionará a los expertos en el tema la información necesaria para desarrollar estrategias efectivas de mitigación y adaptación al cambio climático. Desde la detección de áreas propensas a inundaciones hasta problemas específicos en los cultivos, la IA está ayudando a identificar y abordar los desafíos de manera más precisa y oportuna.
¿Sólo la IA arreglará el Cambio Climático?
A pesar del avance tecnológico, la responsabilidad individual y colectiva sigue siendo fundamental. Cuidar nuestros recursos naturales y reducir nuestra huella de carbono son acciones esenciales que todos podemos tomar para contribuir a la lucha contra el cambio climático. La tecnología puede ser una herramienta poderosa, pero solo cuando se combina con una voluntad genuina de cambio y acción, podemos esperar ver resultados significativos.
La colaboración entre la NASA y IBM Research representa un paso importante en la lucha contra el cambio climático. Al utilizar la inteligencia artificial para analizar datos terrestres, están proporcionando a los expertos las herramientas necesarias para comprender mejor y abordar los desafíos climáticos actuales y futuros. Sin embargo, es importante recordar que la tecnología por sí sola no es suficiente; se necesita un compromiso colectivo para cambiar nuestras acciones y proteger nuestro planeta para las generaciones venideras.
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